Si estás leyendo este post es que tienes una curiosidad muy grande sobre si eres o no un verdadero Nomadizer. Ser o no ser nomadizer, esa es la cuestión.

Verás, aunque para nosotros un Nomadizer es aquel que vive la vida que le hace feliz y viaja en busca de su yo más auténtico, hay una serie de características que nos hacen diferentes. Te explicamos cuáles y tú decides si formas parte de nuestro Mundo (llegados hasta aquí, seguro que sí ?).

• Un Nomadizer es un espíritu libre. Es de aquí y de allí. De todas partes y de ninguna. Se apunta a cualquier sarao con tal de divertirse y se siente dueño de su propia vida. Sobre todas las cosas, quiere vivir, y no entiende la rutina como un modo de vida permanente. Podríamos decir que el Nomadizer está en constante evolución.
• Cuando inicia un viaje, representa mucho más que conocer un lugar nuevo. Si eres un Nomadizer entenderás qué significa viajar buscando la felicidad. Moverte de un lado para otro, como un nómada, te aporta esa frescura que necesitas para sobrevivir en una sociedad que cada vez te permite ser menos espontáneo. Viajar te da alas.
• Es un culo de mal asiento, como dirían las abuelas. Está en una búsqueda constante, aunque no siempre encuentra lo que busca. Pero hay algo en el Nomadizer que le impulsa a buscar y buscar, con el objetivo de sentirse más feliz.
• Le chifla rodearse de gente. Conocer nuevas personas le enriquece, porque entiende que cada historia merece ser compartida. Y con cada amigo que hace, la vida le resulta un poco más comprensible.
• Es un poco «go with the flow«. Algunas cosas parecerán no importarle demasiado «porque si son así, es porque tienen que ser así». Las explicaciones no las busca en el pensamiento lógico, sino en las consecuencias. Y tiende al positivismo exagerado. Cuando algo malo sucede es porque algo mejor debe venir. Y no hay más.
• Es muuuy curioso. Todo lo nuevo le atrae, como a los gatos. Quiere aprender lenguas para conocer a gente y sumergirse en nuevas culturas. Quiere conocer y reconocer el mundo, todos sus rincones. Puede resultar un tanto agotador, en el sentido de que no para nunca quieto. Correcto, ¡así eres tú!
• Cuando ha viajado a otro lugar y se siente parte de esa tierra, siente una paz inexplicable. Una felicidad que le llena por todos los costados. Esa es la mayor recompensa que puede ofrecerle la vida. ¡Ay! ¡No hay nada mejor!
• Y reconozcámoslo… ser amigo de un Nomadizer puede ser agotador pero es ¡tan divertido! Siempre hay algo que hacer, algo por lo que moverse, y nada lo detiene. Un Nomadizer es un nómada del siglo XXI, con un montón de herramientas a su alcance que le permiten expresarse y sentirse como debe. Y es una pasada poder hacer lo que amas, ¿o no?

¿Qué nos dices? ¿Te atraves a ser un auténtico Nomadizer? ¿Tienes la fiebre de viajar y descubrir la vida en otros lugares?

No te resistas más… ya sabes lo que pensamos: la vida, son dos días.

¡Nos vemos en el Mundo Nomadizer! ¡Paz y viajes!